Ante esta emergencia alimentaria muchas veces invisible en la agenda pública, desde el Observatorio Villero (OV) realizamos en este relevamiento de alimentación comunitaria (2023) a familias que viven en barrios populares, a través de nuestras asambleas territoriales, con el objetivo de visibilizar la situación alrededor de las familias: si recurren o no a un espacio alimentario y de qué manera es su participación ya sea por la amplitud de la cobertura, la cantidad de comidas, la regularidad y la trayectoria a través del tiempo. Además de esto, nuestro trabajo se enfoca particularmente en los niños, niñas y adolescentes que componen las familias relevadas.

Los comedores y merenderos en los barrios populares vienen funcionando desde hace más de 40 años y han generado redes de cuidado fundamentales, sostenidas por el trabajo de las comunidades, principalmente llevada adelante por las mujeres. La inseguridad alimentaria es una de las principales causas de la pobreza y desigualdad estructural.

El trabajo comunitario en comedores y merenderos es parte central del sustento económico para numerosas familias en los barrios populares de nuestro país. Esta red de trabajo, organizada en distintas comunidades, no recibe reconocimiento por parte del Estado. No obstante, es el Estado, a través de distintos dispositivos a nivel Nacional, Provincial y Municipal, el que delega en las y los trabajadores, mayoritariamente mujeres, la tarea de preparar los alimentos.

En diferentes barrios populares, hemos identificado familias con una larga trayectoria de asistencia a estos espacios, incluso casos en los que han tenido que apoyar sus ingresos familiares de manera regular a lo largo de generaciones. Además, a partir de la información de los 140 espacios alimentarios que tiene La Poderosa en Argentina, hemos identificado la gran emergencia en términos de alimentación que representó la pandemia y que a pesar de ya haber pasado la crisis sanitaria del COVID-19 no se ha superado. Las largas filas y la alta demanda que se sostiene en nuestros espacios alimentarios son un ejemplo de ello. Sólo La Poderosa desde ese momento sostiene 40.000 raciones de comida diarias.

El Registro Nacional de Comedores (RENACOM) del Ministerio de Desarrollo Social (MDS) busca contabilizar los espacios de este tipo en funcionamiento a nivel nacional así como las personas responsables y colaboradores que trabajan en dichos lugares. Esta información no está publicada en ningún sitio del MDS. En el primer trimestre del 2023 La Poderosa realizó un pedido de acceso a la información pública al RENACOM, en el contexto de la presentación del Proyecto de Ley para el Reconocimiento Salarial a las Cocineras Comunitarias, para tener números sobre la amplitud de la cobertura alimentaria en espacios comunitarios.

La cantidad de comedores en el RENACOM asciende a 34.782. El 78% de sus responsables son mujeres. El total de trabajadores y trabajadoras registrados son 134.449, de las cuales 75.535 son mujeres (56%). Una aclaración importante sobre el RENACOM es que se puede inscribir a 6 personas por comedor, con lo cual muy probablemente exista un subregistro de trabajadores y trabajadoras. Además, también hay una posibilidad de que exista un subregistro de espacios alimentarios, ya que solamente es obligatoria la inscripción para lugares que reciben recursos del Estado Nacional. Una segunda cosa a tener en cuenta es que falta información de cuántas personas asisten a esos comedores y la ubicación geográfica, pues estos datos no fueron provistos por el MDS.

¡Próximamente estará disponible el informe de este relevamiento en conjunto con la base de datos!